Quiérete a Tí Mismo Primero

Cada día, cuando me despierto antes del salir del sol, mientras la noche aún es soberana y a lo lejos oigo el cantar del gallo, le doy gracias inmensas al Creador por el privilegio de un nuevo día.

 

Concuerdo con la pasión del Sr. Gallo, y me siento maravillada de sentirme tan cerca del mismo!  Mi segunda oración de gratitud va dirigida a mi Señora Madre, la autora de mis días.  Se ocupó de mí, me alimentó con los mejores alimentos que encontraba, preparando mis platillos preferidos personalmente, siempre agregando tres o cuatro pizcas de Amor.

Me acarició y me regañó.  Aunque no lo haya comprendido entonces, realmente se ocupó de mi.  Ahora le agradezco inmensamente pues se que gracias a todo el amor que vertió en mi, me di cuenta de que soy una persona digna de ser amada y de amar.

 

Honro a mi cuerpo, exactamente tal cual es.  Agradezco a Dios por mis talentos, que están al servicio de mis semejantes, mientras estoy siendo Guiada en fe total.  Ingiero solo y exclusivamente alimentos sanos, y respeto vehementemente al agua que bebo. Hago ejercicio regularmente para mantener a mi  ̈Ferrari ̈, sin olvidarme de tomar pausas para descansar; cuando estoy en el gimnasio, me concentro en el músculo que estoy ejercitando y le doy las gracias por sus constantes servicios… y duermo suficientes horas para reponer mis energías. Es una sensación infinitamente hermosa, la de agradecer y apreciar al vehículo que Dios me dió para poder ser parte de esta vida terrenal…

 

 

Diariamente, antes del salir del Señor Sol, y después de haber meditado, hablando conmigo misma, camino en la Naturaleza Libanesa que tanto amo. Si me encuentro en una ciudad, camino entre los edificios y me conecto con los árboles y las personas, sonriendoles al pasar.

 

Para mí está clarísimo, que si me quiero a mi misma primero, entonces puedo amar a los demás de forma espontánea y sin esfuerzos. Si soy fiel a mi misma primero, y NUNCA,  y bajo ninguna circunstancia comprometo ni mis ideales ni mis sueños, viviré en paz, integridad y en armonía, y seré feliz, y me mantendré feliz,  PASE LO QUE PASE.

Que pinche vidón!

 

Orgasmos Espirituales.  Gloria Belendez-Ramirez